miércoles, 7 de abril de 2010

Discurso.

Palabras pronunciadas por Roberto Ramos Molina en el evento de líderes juveniles a favor de Antonio López Sandoval, precandidato a Presidente Municipal de Chihuahua.
Chihuahua, Chih., a 31 de marzo de 2010.

El hacer uso de la palabra se vuelve con los años cada vez más complicado y angustiante sobre todo cuando se hace frente a tantas caras tan conocidas, tan apreciadas y añoradas. Frente a muchos aquí presentes que crecimos y vivimos etapas imborrables de nuestras vidas así: juntos. Frente a tantos de ustedes que en similar espacio del tiempo llegamos a la política a saciar una necesidad de superior trascendencia.

Naturalmente se han sumado nuevas caras a su debido tiempo, pero al final de cuentas somos parte de la generación que creció y maduró en medio de la apasionante lucha democratizadora de México que poco a poco nuestros mayores fueron ganando. En aquel entonces decíamos: “Acción Nacional quiere que haya una ciudadanía consciente y lo podemos lograr en el momento en que cada ciudadano mexicano, sienta que el voto tiene la importancia capital, ya que está dando, en ese acto mínimo, la orientación que quiere dar a la vida de la patria”.

Con este gran antecedente estamos hoy manifestando todo nuestro apoyo Toño López. Y digo que nuestro antecedente es grande porque si algo hemos aprendido como generación que nos marca como cinceladas en la piedra, es que las grandes batallas se ganan con la acción de toda una ciudadanía inspirada por grandes líderes.

Nada más falso y más peligroso que decir que los dramáticos problemas de Chihuahua se solucionan con una fórmula individualista mágica. No mis amigos, esta triste etapa de nuestro Chihuahua querido no se acaba dictando desde la poco humilde postura de un supuesto rumbo ideal. La soberbia del “ellos saben cómo hacerlo”, que acaba siendo un portazo en la cara de los ciudadanos, es referente de otro partido político, no corresponde a la naturaleza de Acción Nacional y mucho nos ha costado ya.

Nuestro estilo de vida, nuestro ideario original, ese que ha acercado a hombres y mujeres de bien, habla del principio de cambio gomezmoriniano. “Esa formación de la conciencia nacional y de una ciudadanía despierta y ágil, resuelta y responsable. El principio es dar a esa conciencia los elementos de convicción y de juicio que la integran; más bien dicho, iluminarla de nuevo.”

Ese principio ciudadano es el que genera los cambios ‘de a deveras’. Ese principio ciudadano es el que hizo que Luis H. Álvarez y Francisco Barrio sin ser grandes estadistas pero sí enormes líderes se convirtieran en el mejor alcalde y el mejor gobernador de nuestra historia moderna.

Qué mejor rumbo que el que propone nuestro ideario y nuestra plataforma política como Partido; qué mejor ruta que la que marca escuchar y planear con la ciudadanía el porvenir que en conjunto anhelan. Qué mejor horizonte que el observar a la ciudadanía volcada en la búsqueda del bien común siguiendo el ejemplo de su líder que la motiva y le dice: hey, despierta, tu participación es importante, eres parte de la solución, si no somos todos no somos nada.

Veo ese liderazgo en ti Toño López. Y veo en tu liderazgo tiempos mejores para nuestra tierra. A muy pocos en el PAN les cabe duda que eres el que más puede dar la batalla en la elección externa. Esa es una gran ventaja. A mi además no me cabe duda, los planteamientos están ya expuestos, que eres el que puede ser mejor presidente municipal de Chihuahua. ¡Adelante!